dulces encantaciones, los murmullos
de tu melena, negra luz de seda
hacen que se entonen ensueños mudos
de corazones ansiosos que alientas
en el laberinto de tu enrejado
que fue soñado con suma paciencia
ay, cuántos quisieran verse atrapados
en sus callados misterios que tantos anhelan
edén y manantial del arco iris
deja que en tu campo florido me pierda
que me arrullen y me embelesen tus caricias
y en tu silencioso abrazo sedoso me duerma
Fuga en sol menor
Siempre, siempre te alejas en las tardes ..........hacia donde el crepúsculo corre borrando estatuas ..................(Hemos perdido aun este crepúsculo, Pablo Neruda)
¿Qué matices olvidados
de granate
podrían llevarme a aquella tarde envuelta
de ensueños ensordecidos por sombras
de la lluvia de un abril
olor a tierra recién mojada y agitada
sombras que emergían de las pausas de la luz
indolente,
indecisa?
sombras
calladas mariposas
se entretejían en los suspiros
de mi incredulidad
de volver a pisar
las hojas pardas, marchitas de arce
que en vano intentan retener
recuerdos escarlatas y primaveras frondosas
de un jardín que una vez
me enseñaste
hace cinco o seis otoños
en un sueño transparente
que de cuando en cuando casi
vislumbro
tu sombra
enredadera vespertina de aire
trepa recuerdos míos, inventados que se fugan
hacia las estrellas